Policías Estatales Fronterizos Ligados a Extorsiones de Narcomenudistas Zetas CDN
MONTERREY, Nuevo León – Un grupo de policías estatales ha estado extorsionando a narcomenudistas solo para vender las drogas incautadas. Los policías, que habían estado recibiendo protección de los más altos funcionarios de seguridad en Nuevo León, tienen una relación laboral con una facción de Los Zetas.
Los oficiales son parte de la agencia policial Fuerza Civil de Nuevo León, que fue creada para combatir a los carteles de la droga, sin embargo, en los últimos meses ha caído bajo una nube de corrupción que llega a sus más altos funcionarios. Se ha consultado con funcionarios policiales estadounidenses que trabajan en México sobre la infiltración de carteles en Fuerza Civil y ha aprendido sobre al menos una docena de oficiales que tienen vínculos con diversas organizaciones criminales.
En uno de los casos más recientes, un grupo de oficiales de Fuerza Civil había estado cateando casas de narcomenudistas y tienditas para extorsionarlos. Los que no podían pagar las “cuotas” enfrentaban arrestos y la confiscación de sus drogas. Sin embargo, algunas de las víctimas comenzaron a denunciar las redadas y presentaron cargos formales contra el grupo de policías. Las quejas formales desencadenaron una investigación en curso que ya condujo al arresto de dos policías mientras que otro aún está bajo investigación.
Durante la investigación, las autoridades registraron el casillero de Edgar Alfonso Rodríguez Moreno, donde encontraron una pistola no registrada de 9 mm, varios paquetes de metanfetamina, joyas, botellas de licor, así como identificaciones y tarjetas de crédito con diferentes nombres. Rodríguez Moreno es el mismo oficial que fue arrestado en 2018 en Coahuila con 134 paquetes de cocaína, pero de alguna manera logró mantener su trabajo en Nuevo León. En el momento de ese arresto, el policía mostró su carnet de oficial de Nuevo León, que las autoridades de Coahuila usaron como parte de sus fotografías y pruebas.
Durante la investigación en curso, las autoridades también registraron a la pareja de trabajo de Rodríguez, el oficial Carlos Alfredo Barrientos Rodríguez. Tanto en el casillero como en el vehículo del policía marcado como la unidad # FC-1955, las autoridades encontraron más metanfetamina, dinero en efectivo y un rifle de aire comprimido que se cree que se utilizó durante las extorsiones. Ambos oficiales están actualmente encarcelados en la prisión estatal de Apodaca por los cargos de allanamiento de morada, abuso de las autoridades, robo y narcomenudeo. Otro oficial no identificado todavía está bajo investigación en el caso. La información de inteligencia de las fuentes policiales de los EE. UU. Identifica que ambos policías tienen vínculos con la facción Cartel del Noreste de Los Zetas que actualmente opera en la mayor parte de Nuevo León.
Sin embargo, en lugar de expresar interés en la corrupción dentro de sus filas, el Secretario de Seguridad Pública de Nuevo León, Aldo Fasci, ha enviado comunicados y expresó su preocupación por las filtraciones que contaminan la imagen de su fuerza policial. Fasci solo ha reconocido la búsqueda de los casilleros, pero se ha negado a revelar los detalles sobre las extorsiones y los lazos de sus policías con una facción de Los Zetas.
